Alonso (o Alfonso) de Aragón nació en Cervera en 1470. Era hijo natural del rey Fernando el Católico y de Aldonza Ruiz de Ivorra, una noble catalana. Alonso de Aragón destacó más en el plano político que en el eclesiástico, puesto que su carrera religiosa no era más que la continuidad de una vieja costumbre según la cual la Iglesia aragonesa tenía que estar regida por algún miembro de la Casa Real. Así a la muerte del Arzobispo de Zaragoza, Juan de Aragón, hijo ilegítimo del rey Juan II, el rey Fernando II propuso que su hijo de cinco años le sucediera, pero debido a su corta edad, el Papa Sixto IV, designó a Ausías de Puggio. Sin embargo, las presiones continuaron y finalmente el Papa confirmó a Alonso como arzobispo tres años después, en 1478.
Contrajo matrimonio con Ana de Gurrea (1470-1527), con la que tuvo 7 hijos (cinco chicos y dos chicas).
En 1507 fue designado lugarteniente general del rey en el reino de Nápoles, en sustitución de Gonzalo Fernández de Córdoba.
En 1512 mandó las tropas que cercaron y rindieron a la ciudad de Tudela en la conquista de Navarra por la Corona de Aragón, cuando aún no habían autorizado a la misma ni las Cortes de Aragón ni la ciudad de Zaragoza.
Al morir su padre en 1516, en el testamento, quedó como Lugarteniente General del Aragón, con los demás territorios de la Corona Aragonesa, hasta la llegada de su sobrino Carlos como Gobernador General de la Reina Juana; pero esta voluntad no fue aceptada por las instituciones aragonesas, y el vacío de poder se subsanó en noviembre de 1518 con la jura de los fueros de Carlos, como rey en su nombre y en el de su madre Juana. Hecho lo cual, Carlos confirmó a Alonso como Lugarteniente General hasta su muerte en Lécera en 1520.
Alonso, como Arzobispo de Zaragoza, realizó importantes obras en la Catedral de Zaragoza (La Seo del Salvador), donde reposan sus restos.
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